José Enrique Aguar y Mamen Peris han visitado la localidad de Moixent para comprobar en qué estado ha quedado la zona del Riu Canyoles dónde se inició un incendio el pasado domingo y que fue arrasada por las llamas. Los diputados provinciales han sido guiados por el alcalde de Ciudadanos, Teófilo Fito, quien les ha explicado en qué consistieron las tareas de extinción y en qué estado han quedado los terrenos quemados.
El diputado provincial José Enrique Aguar, ha explicado que contra los incendios, “hay que poner todos los medios posibles y no entrar en intereses partidistas”. Aguar ha recalcado que una tarea importante para que éstos no se produzcan es la prevención, “para que montes, vías pecuarias y los márgenes estén limpios, y no se pueda favorecer la propagación de las llamas”, ha recalcado.
En ese sentido Mamen Peris, ha recalcado que el posicionamiento de C’s a nivel nacional es claro, puesto que se ha preguntado al Gobierno sobre los últimos incendios declarados, “si ha evaluado la posibilidad de declarar como zonas catastróficas las superficies dañadas”. La diputada provincial, además, ha subrayado que, “Ciudadanos ha instado al Gobierno a que facilite a los municipios y vecinos afectados toda la información necesaria para pedir ayudas o subvenciones para las necesidades derivadas de situaciones de esta naturaleza catastrófica”, ha recalcado Peris.
El alcalde de Moixent, Teófilo Fito ha explicado a los diputados en su visita a la zona dañada que tras declararse el incendio se movilizaron seis medios aéreos, una dotación del Consorcio Provincial de Bomberos de Valencia, dos unidades de Bomberos Forestales, una autobomba, un agente medioambiental y una unidad de vigilancia para que no se extendiera a las zonas aledañas, ricas en vegetación y de gran valor medioambiental.
La intervención de los bomberos hizo que se extinguiera con rapidez y solo afectara a partes del cauce del río y a la carretera de Moixent-Fontanars, que rápidamente fue cortada, perimetrada e impidió que el incendio alcanzara a la Sierra de la Atalaya y a una fábrica de muebles cercana al origen de las llamas.
Por último, el primer edil ha subrayado que de no ser por la rápida actuación de los bomberos “la catástrofe hubiera sido incalculable si las llamas hubieran atravesado la carretera y hubieran llegado a la zona de bosque”. Con todo, la superficie arrasada por el fuego, “ha sido de cinco hectáreas; dos han afectado a diversos cultivos y las otras tres de monte bajo, en el Riu Canyoles”, ha apostillado Fito.